¿Eres más feliz gastando más dinero?
La vida es muy corta como para no aprovechar el máximo de ella, pero… ¿es gastar el camino?
Últimamente estoy algo existencial.
Después de la marcha totalmente sorpresiva e inesperadisima de mi único tío (si, somos una familia pequeña, al menos una parte) reconozco que me he replanteado algunas cosas. También en cómo gasto y vivo mi vida.
Mala costumbre la que tenemos.
La de reflexionar sobre nuestras vidas en momentos así.
En nuestras relaciones y en cómo las hemos vivido. Deberíamos celebrar cada momento y saber que estamos viviendo la vida que queremos. Pero somos así.
Y en general no aprendemos.
Lo importante
Uno reflexiona sobre todo cuando pasa algo así.
Al final mi tío no era solo tío ni mucho menos, sino que era mucho más: padre, hijo, marido, hermano… como lo serán los vuestros. “Solo” era mi tío.
Cuando se muere alguien tan cercano, no solo se muere lo que es para nosotros.
También para los demás. Y se muere una parte de nosotros con el, de nuestros recuerdos y vivencias.
Así es la vida. Para todos.
La reflexión
Uno se plantea cosas.
Una de las cosas sobre las que he reflexionado ha sido el uso de mi tiempo y mi día a día.
Por mentalidad, tiendo a trabajar mucho. Me gusta lo que hago… pero es trabajo. Aunque a veces me lleve a sitios como el de la imagen de mas abajo.
Y me quita tiempo que podría usar en otras cuestiones más importantes.
Reflexión: medita el uso de tu tiempo. Es limitado y es tu riqueza. Con quién y cómo lo empleas y para qué o por quién.
Pero también he pensado sobre cómo manejo el dinero. Y muy profundamente.
Porque dinero es tiempo. Y tiempo es dinero.
Es comprensible que después de la pérdida de un ser querido, el dolor y la tristeza puedan tomar el control de nuestras vidas. Lo primero que piensas es… tengo que vivir más el presente.
Sin embargo, no debemos dejar que ese dolor nos impida seguir pensando en nuestro futuro y en las metas que queremos alcanzar. Que el hoy no nuble nuestra visión. Es aquí cuando pienso en la inversión.
La inversión es una herramienta valiosa para alcanzar nuestras metas financieras y permitirnos tener la libertad y el tiempo para disfrutar de aquellos que amamos. Por eso es importante.
Y es igual importante recordar que la vida es efímera y no podemos predecir el futuro.
Debemos hacer todo lo que podamos para prepararnos para lo que pueda venir. Hacer las cosas bien. Mi tío disfrutó pero ahorró e invirtió, y ahora deja una posición razonable a sus seres más queridos. Imaginaos lo contrario. El vivió sin necesitar de ser un “gaston”
Ahorrar e invertir no solo nos ayuda a lograr un futuro financiero seguro, sino también nos permite tener una vida más libre y sin preocupaciones, lo cual es especialmente importante cuando se trata de disfrutar de nuestros seres queridos. Y de tiempo.
Es natural que nos enfoquemos en el presente después de la pérdida de un ser querido, pero es igualmente importante pensar en el futuro y hacer lo necesario para lograr una vida financiera segura. ¿Y si vivimos más de lo esperamos?
Es por eso que creo en un equilibrio claro entre presente y futuro. Y en la inversión valiente y alternativa.
Creo que se puede disfrutar de muchas cosas y momentos.
Pensamos que las cosas que nos hacen felices son caras.
Pero no. A mi una conversación con mi tío me hacía feliz. Y no costaba nada.
Por eso, plantéate si lo que te hace verdaderamente feliz cuesta dinero. Muy probablemente no. Y el resto de cosas sean imposición de la sociedad.
La inversión es una forma de prepararse para el futuro y de asegurarse de que podamos disfrutar de nuestras vidas y de los que amamos sin preocupaciones financieras. Cuanto antes lo hagamos mejor. Y cuanto antes lo consigamos también mejor. Llegando a un equilibrio entre presente y futuro.
Así de sencillo. Eso es ser valiente.
Feliz fin de semana.